Los siguientes días fue un bombardeo a mis neuronas, cada espacio, cada charla fue una cantidad infinita de “Datas” (así le dicen los argentinos a la información) que hasta el día de hoy no he podido procesar.
Conociendo ya la misión del obrador y los 5 personajes ejes que la viven inicia mi trabajo técnico, iniciamos desde el dibujo, desde la deconstrucción de mi técnica realista pasado a un plano más simple, Luxor me coloca el reto de trabajar con pocos tonos de pintura y un solo marcador, yo, enseñado a tener 8 todos de aerosol, manejar espacios grandes y a tener un referente cuadricula me encuentro en el aprieto de trabajar con el 10 % de lo pediría y no feliz con ello cambio mi herramienta de aerosol y válvulas a pinturas vinílica y pinceles.
Mentiría si ese día me costó mucha salir de mi zona de confort, fueron varios intentos, varias borradas, varias preguntas, el solo despegarme de la sobra y la luz fue difícil, pero la experimentación y me imagino yo, el recorrido que me da el tiempo me dio la salida para resolver y dejar en una pequeña tabla un producto, que, si bien conserva mi estilo, es totalmente diferente a lo verán en las calles.
¿Quieres cambios? ¡Toma el riesgo!
